BLOQUE 5 CREACIÓN LITERARIA

PROSA

Actividad: Binomio fantástico

Descripción: A partir de dos palabras sin relación aparente, se crea una historia.

Edad a la que va dirigida: 5º de primaria

Palabras elegidas: Playa y madre

Esta historia comenzó en un día en el que la vida de un niño muy especial vino a la vida. Este niño vivía en un mundo muy distinto a este. Era un mundo lleno de una luz muy intensa, con unos colores muy débiles, pero a medida que el niño crecía y su corazón latía más y más fuerte, estos colores se volvían más intensos.

En un principio el niño se sentía solo en esa especie de mundo sin salida, no tenía a nadie. Nadie con quien hablar, nadie con quien jugar, nadie con quien reír y compartir cosas. ¿Acaso estaba solo es ese mundo? ¿Qué hacia allí? ¿Cuál era su labor? ¿cuál era su nombre?... Miles de preguntas le rondaban por la cabeza pero no podía encontrar ninguna respuesta. No recordaba absolutamente nada de porqué ni cuando llego allí. Así pues, decidió armarse de valor y salir en busca de respuestas.

¿Pero hacia dónde? Realmente el pobre niño estaba perdido ¡ENTONCES FUE CUANDO RECORDÓ! que las voces que hoya en su cabeza hablaban de ir a un sitio donde haga más calor como la playa.

¿¡A que no os lo había dicho!?

Si, si, es cierto, escuchaba voces. A veces, eran muy lejanas, tato es así, que muchas veces no entendía nada, pero otras veces las sentía casi en su propia cabeza. Pero con el paso del tiempo aprendió a ignorarlas porque casi todo el tiempo no hacían mas que decir cosas sin sentido.

Fue entonces cuando escuchó una especie de canción allí a lo lejos. Era una voz muy conocida, una voz que relajaba todos sus sentidos. ¿Habría alguien allí? ¿acaso eso era una señal? ¡SI! Definitivamente ese era el momento de moverse y descubrir el mundo más allá en busca de nuevas respuestas. Así fue como nuestro niño alzo el vuelo y comenzó la búsqueda de si mismo.

Nada más emprender el vuelo, el niño comenzó a ver el mundo más allá de lo conocido y aquellas luces de colores comenzaron a coger distintas formas. Frente a él se mostraba un nuevo mundo lleno de árboles enormes, con hojas de distintos colores, montañas, ríos que creaban un paisaje maravilloso.

El niño no podía creérselo ¿por qué no emprendió el vuelo antes? ¿A qué estaba esperando? ¿cuánto tiempo estuvo quieto allí escuchando las voces de su cabeza?

Fue entonces cuando observó a alguien a lo lejos. Era otro niño. Un niño como él. No estaba solo, por fin descubrió a alguien más. Sin dudarlo dos veces se acerco a él y se dieron un abrazo como si de toda la vida se conociese. Los dos pensaban que estaban solos y descubrieron que no, que no era así. Fue el día más feliz de sus vidas.

Desde entonces los dos fueron uña y carne. No se separaron para nada. Viajaron por todo aquel mundo que cada vez más se asemejaba a todo aquello que deseaban, tanto es así que tenían todos los caprichos necesarios y por a ver. Solo tenían que imaginar aquello que querían y ¡pum! A parecía frente a ellos. Eran niños con súper poderes. Unos poderes que aumentaban con el paso del tiempo.

Pero a medida que sus súper poderes aumentaban, el mundo que les rodeaba se comenzaba a encoger. Al final su mundo se encogió tanto, tanto, tanto, que los dos niños se quedaron abrazados sin movilidad alguna. Ya de nada les servían sus súper poderes, únicamente se tenían uno al otro. No quedaba espacio para los dos, y las voces de sus cabezas retumbaban en su oídos cada vez más y más fuerte. ¡¡DE PRONTO TODO COMENZÓ A TEMBLAR! ¡Las voz que antes les relajaba ahora chillaba en sus oídos! Era el fin. Los niños se abrazaron muy fuerte despidiéndose y dándose gracias por todo los momentos buenos que compartieron juntos.

De pronto algo los separó y una fuerza les empujaba hacia una luz muy intensa. Ellos se resistían, lloraban y lloraban asustados de miedo, pero una mano los saco de allí y de nuevo volvió aquella luz blanca.

Juan, abrió los ojos y allí vio a su querido amigo frente a él, o más bien, hermano. Aquella voz que les calmaba ahora se escuchaba de nuevo, pero mucho más nítida. Ella fue la que les protegía en aquel maravilloso mundo y ahora los trajo a este mundo que conocemos. Como no, aquella voz, era la madre de los dos gemelos Juan y Pedro.

CREACIÓN EN VERSO

Estrategia utilizada: ¿CÓMO TE LLAMAS? Crear un acróstico con las letras de nuestros nombres.

Esta actividad va dirigida a cualquier tipo de edades por la facilidad que tiene. El profesor marcará la complejidad de esta. Cuanto más pequeños mas simple en cambio con los más grandes se podría exigir algo más para que sea un poco más complejo.

AMAR

INQUIETO

TXALAPARTA

OBJETIVO

RESPETUOSO

LIBROS

INTELIGENCIA

TEMPORAL

ESCAPAR

RESCATAR

APRENDER

TRANSFORMACIÓN

UNIVERSAL

RENACIMIENTO

AGRADECIDA

Lo he hecho en dos formatos. La primera es para niños más pequeños donde la letra se entiende bien. En cambio la segunda ya es más compleja con letras personalizadas.

DRAMA

He creado un cuento que se le podría contar a cualquier edad, de todos modos estaba pensando más en niños de entre 7-9 años.

En tiempos lejanos, donde aún los dragones volaban sobre los cielos, había una ciudad atemorizada por la llegada de un enorme dragón rojo. Este dragón se puso a vivir en una cueva de la montaña.

La gente asustada se reunió en la plaza del pueblo para hablar.

Campesinos- ¡No puede ser! Hay un dragón enorme en la montaña debemos actuar antes de que se establezca de por vida, y acabemos todos en su estómago.

La campesina- El rey debería de actuar ya y mandar a todo su ejercito para acabar con el antes de que se coma a nuestro niños.

Fue entonces cuando llegó el rey a aquella aglomeración de gente que no hacia mas que chillar y agonizar por la llegada del dragón.

Campesino- ¿Pero a que espera mi rey para mandar el ejercito entero a acabar con ese dragón?

El rey- Son muy pocos los que se atreverían a luchar contra ese enorme dragón, la mitad del ejercito se a negado a ello, un cuarto a huido de la ciudad ante el temor de un ataque y los pocos que han quedado están de camino a la cueva. Les prometo que traerán la cabeza del dragón como prueba.

La gente del pueblo esperó impaciente la llegada del ejercito con la cabeza del dragón pero nunca llegaron. La gente comenzó a huir y a exigirle al rey que hiciera algo.

Campesino- Majestad nos prometiste la cabeza del dragón, ya han pasado dos días y nadie a aparecido.

El rey- No temáis, ya mandé a mis mensajeros para que todos los reinos del mundo sepan nuestro problema y acudan todos los caballeros valientes capaces de matar al dragón. Y para que nadie dude en venir he ofrecido una grandísima recompensa.

Fueron mucho los caballeros que pasaron por aquella ciudad, pero ninguno volvió de aquella cueva.

Campesinos- Mi rey esto no puede ser no hacemos más que alimentar con caballeros al dragón y ni siquiera sale de allí.

De pronto apareció un caballero muy apuesto con una armadura que le cubría todo el cuerpo, acompañada de un fiel escudero montado en un burro cargado de mil y un trastos.

El apuesto caballero- No temáis habitantes de la ciudad. Mi nombre es Rotum el caza dragones. Conocido en más de mil reinos por mi gran valentía y capacidad de matar a estos dragones.

Campesinos- oh gracia a dios que llegaste. Necesitamos que mate a ese dragón, de lo contrario no matará a todos.

El apuesto caballero- Tienes razón debo comenzar inmediatamente. Ya he visto demasiados pueblos y ciudades enteras devastadas por dragones más pequeños que este. Solo que...

Campesino- Solo que...¿que?

El apuesto caballero- ejem... todo ello conllevará un gasto... que habrá que pagar.

El rey- Usted mate al dragón y le daré lo que sea.

El caballero- ¿Lo que sea? ¿está seguro?

El rey- Se lo juro por lo que más quiero en este mundo.

El caballero- Que conste que todo el pueblo es testigo de ello suegro mio.

El rey- ¡Pero que se a creído! Yo hablaba de la gran recompensa que ofrezco.

El caballero- La verdad que ni todo el oro del mundo sería valido para no fijarme en la belleza de su hija mi señor

El caballero se bajo del caballo y se acerco a la princesa y le hizo una reverencia mientras cogía su mano y besó la parte superior. Esta enseguida quito la mano ya que no fue de su agrado.

El caballero- La verdad es que estoy muy cansado de viajar y su castillo me gusta ¿para qué tener una pizca de oro si puedo tener toda la ciudad y la joya más preciada de la corona?

El rey miró a su hija, con cara de tristeza, esta se horrorizo al ver el rostro de su padre. Los campesinos comenzaron a chillar todos juntos.

Campesinos- ¡Lo juraste!. ¡No puedes faltar a tu palabra de honor! ¡Es el único que nos puede salvar!

Así fue como el rey acepto el trato. La princesa se enfureció muchísimo al ver que su padre acepto sin su consentimiento aquella proposición, así que huyó a lomos de su caballo hacia el castillo sin decir nada.

Cayó la noche. El caballero y su fiel escudero se hospedaron en la posada del pueblo donde gozaron de una gran comilona a nombre del rey y gozaron del mejor dormitorio para un descanso de auténticos caballeros.

Al día siguiente todo el pueblo les esperaba fuera. Aclamado la cabeza de aquel malvado dragón.

El caballero- Escucha como me aclaman mi fiel escudero. En estos momentos yo soy su dios y en cuanto acabes con ese dragón yo me proclamare rey jajajaja

El escudero- Eso será si el dragón no acaba con migo antes. Además ¿por qué siempre he de ser yo quien mate al dragón mientras tu huyes como un vil cobarde?

El caballero- Estas equivocado mi fiel escudero, yo huyo como elemento disuasorio mientras tu le clavas la estaca en el corazón sin que se entere. Además yo soy el que te saco de aquella mazmorra mientras te pudrías. Realmente fuiste muy barato y me has hecho de oro, pero me perteneces y me juraste lealtad.

El escudero- hasta que te casaras. La palabra es la palabra.

El caballero- Muy bien dicho.

Así fue como sin darse cuenta, aparecieron en frente de la cueva, de donde salía un hedor y calor horrible. De repente el caballo comenzó a relinchar y el burro rebuznó a la vez que levantaban las patas de delante, de modo que los dos hombres cayeron al suelo como un par de sacos de patatas. El caballo y el burro huyeron asustados. El caso es que aquellos bártulos que llevaba el escudero en el burro produjeron tal ruido al caer que el dragón se despertó, perdiendo el factor sorpresa.

El caballero- Maldito seas, pero que patoso eres

El escudero- Ayúdame a quitarme todas estas cosas de encima señor. Que no puedo con todo el peso.

El caballero comenzó a ayudarle pero al oír el rugido del dragón huyó como un cobarde dejando allí a aquel pobre escudero. El escudero comenzó rápidamente a intentar quitarse en máximo peso posible pero para cuando se quiso dar cuenta allí estaba el frente a frente.

El dragón- ¿Quién es el valiente que osa despertarme de la siesta tan temprano? ¿No sabes que es de mala educación llegar sin antes avisar?

El dragón abrió la boca enseñando sus afilados dientes y se abalanzó hacia el escudero. Cuando el horrible hedor que emitía su aliento casi desmalla al escudero. Zzzzzzzzz ¡plas! Zzzzzzz ¡plas! Unas flechas proveniente de unas rocas más altas hirió al dragón en la boca y el el cuello, dándole suficiente tiempo al escudero para coger una espada y escapar corriendo hacia aquellas rocas.

El dragón- Me las pagaras. Me engañaste.

El escudero corrió pero se vio nuevamente rodeado de unas rocas casi imposibles de escalar. Así que se puso con la espalda contra las rocas, alzo la empuñadura.

El escudero- ¡Ven, ven y acabare contigo como lo hice con el resto! No serás ni el primero ni el último, no seré yo quien muera hoy, aún no llego mi hora.

El dragón corrió hacia donde estaba el escudero, y de la nada apareció aquel arquero con el rostro tapado, lanzando un montón de flechas, impidiendo que en dragón avanzara. Este le tiro una cuerda.

Arquero- ¡Corre sube si no quieres ser hombre muerto escuderito!

El escudero subió como nunca un hombre pudo subir por una cuerda, cogió la mano del arquero para ayudarse a subir y juntos escaparon montaña arriba.

Una vez refugiados en un lugar seguro, decidieron esperar a recuperar el aliento.

El arquero- La verdad que cuando te vi entrar al pueblo nunca pensé que podrías tener tal valentía. En cambio al caballero se le va la fuerza por la boca.

El escudero- Qué decirte, valiente no se pero estúpido si que soy, nunca más volveré ha repetirlo. Te debo la vida caballero.

Fue entonces cuando salio una gran carcajada de aquel arquero.

El arquero- jajajajaja caballero. Que crees que solo los hombres pueden lanzar y luchar tan bien.

El escudero no daba crédito al ver como aquel arquero se quitaba los trapos que le tapaban la cabeza y de ella comenzó a salir el rostro más bello que jamas había visto agitando la melena pelirroja hacia un lado y otro.

El caballero-¡Tu! ¿Pero que haces tu aquí?

La princesa- ¿Cómo qué, qué hago? Salvar mi pellejo y por lo visto el tuyo, antes de que aquel caballero me tomara por esposa. Antes muerta. Por eso he venido aquí porque tengo un plan. Estos montes son míos y me los conozco de arriba abajo.

El caballero- ¿Pero estas loca? ¿Después de todo quieres volver?. Huyamos de aquí.

La princesa- Huir no es lo mío. Hay que enfrentarse al problema sino el problema nos comerá a nosotros. Hay que matar a ese dragón por el bien de todos.

El caballero- Definitivamente estas loca.

La princesa comenzó a correr ladera arriba y como no el fiel escudero junto a ella. Hasta que paró en un gran hoyo. Abrió el saco que llevaba y comenzó a sacar de todo.

El escudero- ¿Qué pretendes? ¿Cuál es tu plan?

La princesa- Vamos a explotar la cueva. Así nunca mas podrá cobijarse aquí ningún otro dragón y el pueblo será libre de sus ataques. Este hoyo da a la parte mas profunda. Antes de que vuestra insensatez despertada al dragón ,coloqué otros explosivos en la entrada y en otros hoyos. Cuando encendamos esta y estalle, estallaran las demás.

Y así fue. La princesa lanzó el explosivo al fondo del hoyo mientras ellos se resguardaban en un lugar seguro. El dragón debió de darse cuenta porque huyó volando un poco antes de la explosión.

Desde aquel día, nuestras dos valientes personas no se separaron. Jamás supieron de aquel caballero fanfarrón pero tampoco les importó. Porque juntos fuero muy felices y con el tiempo hasta el escudero aprendió a cocinar perdices.